Me encantan los bolsitos con cierre de metal, me he enganchado con ellos, y tenía pendiente hacer alguno un poquito más grande que los monederos de boquilla que ya he hecho. Como no me cunde nada me he pasado toda la semana pasada para hacerlos y aquí está el resultado.
El primero con colores otoñales, que me encantan.
El segundo con telas japonesas que, aunque no suelen gustarme demasiado porque yo soy de más color, en esta ocasión han quedado perfectas.
Y como no, sus respectivos detalles colgando del asa.
En esta semana que hoy empezamos espero poder hacer alguno más.