Hace unos tres años conocí a Ana Esther en Málaga y vi la preciosidad de casa que tiene, cuidada hasta el más mínimo detalle, con flores naturales de su jardín en tooooodas las habitaciones, con pequeños detalles de tela hechos para las macetas, con pequeñas cosas precioooosas en todos los rincones. Y yo me enamoré de su cuarto de baño, con una vitrina de madera decorada a través de cuyo cristal se veían todas las toallas colocadas por colores y con unas puntillas preciosas de crochet.
Siempre he querido hacerme un juego de toallas así pero nunca encuentras el momento. Esta vez lo he conseguido. Es una pena, lo foto no hace justicia, porque la verdad, la combinación de chocolate y naranjas matizados ha quedado preciosa.
Ahora sólo me falta comprarme un precioso chalet cerca del mar, con un gran cuarto de baño, para poder hacerme una preciosa vitrina decorada y colocar mis bonitas toallas, ja, ja.
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